Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino: Nuestro compromiso está con su lucha por la liberación

El 29 de noviembre, Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, se conmemora la fecha en que la Asamblea General de las Naciones Unidas, en 1947, propuso la partición de Palestina mediante la resolución 181. Con esta decisión se inició la Nakba, que ha marcado el devenir de la tierra y del pueblo palestino. Desde entonces, se han debido enfrentar a las múltiples estrategias del sionismo para establecer un Estado en la Palestina histórica.

La Ocupación continúa con su política de estrangulamiento, de hambruna, de presión humanitaria y de ataques contra la Franja de Gaza. La declaración de paz solo ha sido un simulacro que intenta silenciar las protestas y la solidaridad internacional.

Como Movimiento por el Agua y los Territorios nos sumamos al llamado a movilizarse por la liberación de Palestina que contribuya a generar espacios de conversación, debate, información, difusión y de diferentes tipos de acciones que permitan visibilizar el genocidio en curso en Gaza y en toda Palestina, así como el sistema colonial y de apartheid que el ente sionista ha impuesto al pueblo palestino desde hace 78 años.

Por eso, nos hacemos parte de los llamados a boicot, desinversión y sanciones a Israel, a poner fin al apartheid del agua y a la complicidad de la agroindustria, a imponer un embargo energético global y, sobre todo, a excluir al Estado de Israel de todas las instancias internacionales hasta que cumpla con el derecho internacional.

Como Movimiento, vemos con preocupación la institucionalización, por parte del Estado sionista, mediante diversas leyes, del proceso de desposesión de tierras al que ha sido sometido el pueblo palestino. Desde 1948, algunas leyes israelíes han permitido la apropiación de territorio, la construcción de asentamientos y la creación de parques nacionales, entre otras. Son leyes que han constituido la base para la toma ilegítima de tierras palestinas y que son contrarias al derecho internacional, todo ello siempre acompañado del crimen sistemático, de la masacre de comunidades y de pueblos enteros y de la intensificación del genocidio.

Asimismo, vemos cómo la ocupación utiliza el agua como un arma para intentar secar y expulsar al pueblo palestino de sus tierras, suministrando agua contaminada, cortando cañerías de distribución y llenando los pozos palestinos con cemento, medidas que profundizan un régimen de apartheid hídrico administrado por Israel. A esto se suma el accionar de grandes intereses inmobiliarios y de la extracción de combustibles fósiles en Gaza, que se presenta como un botín mayor en medio de un desastre socioambiental ya en curso. Entre octubre y noviembre de 2023, las emisiones de CO₂ causadas por Israel en Gaza habrían igualado las emisiones anuales de entre 20 y 33 países de bajas emisiones, sin considerar el impacto del ejército de ocupación, el combustible incendiado en las armas, el asbesto liberado por las edificaciones destruidas y la contaminación total del agua controlada por Israel. En esta necrópolis que han convertido Gaza, donde se destruyen tierras agrícolas, sistemas de agua y saneamiento, y se acumulan escombros y residuos tóxicos, diversos análisis advierten que la magnitud y previsibilidad de estos daños permiten calificarlos como un posible ecocidio, por lo que expertos y organizaciones internacionales demandan investigaciones y mecanismos de responsabilidad internacional.

En el Movimiento por el Agua y los Territorios entendemos que la liberación de Palestina abre las posibilidades para la liberación de los pueblos del mundo. Por eso destacamos la perseverancia del pueblo palestino, que durante décadas ha resistido a poderes imperiales y coloniales que han intentado borrar su existencia y, aun así, continúa abriendo caminos hacia la dignidad y la autodeterminación. Este 29 de noviembre nos adherimos a las manifestaciones por Gaza y Palestina e instamos a redoblar la presión para poner fin al colonialismo, al apartheid y a la ocupación en Palestina. Nuestro compromiso es firme: acompañar la lucha por la liberación del pueblo palestino y por una Palestina libre, desde el río hasta el mar.

¡Palestina Libre!